EL MEDIO FÍSICO ANDALUZ

En esta entrada se va a escribir sobre el medio físico de Andalucía. Comenzar por su ubicación, sobre la que podemos decir que Andalucía tiene una extensión de 87.597 km2, que hacia el este y el oeste limita con el Mar Mediterráneo y con el Mar Español respectivamente, mientras que al norte lo hace con Sierra Morena y al sur con el Estrecho de Gibraltar.
Ésta se localiza en una latitud entre los 36º y los 38º44’ N, en la zona templado-cálida de la Tierra, dando a su clima características muy definitorias como la bonanza de sus temperaturas y sequedad de sus veranos. Se encuadra en su totalidad dentro del dominio climático mediterráneo, caracterizado por el predominio de las altas presiones estivales, que traen como consecuencia la típica sequía estival, rota en ocasiones con precipitaciones torrenciales y temperaturas tórridas. En invierno, los anticiclones tropicales se desplazan y permiten que el frente polar penetre en el territorio provocando que la inestabilidad se acreciente y las precipitaciones se concentren en invierno, otoño y primavera. Las temperaturas son muy suaves.
Pasamos a hablar del relieve de Andalucía del que podemos decir, que es uno de los principales factores que configuran el medio natural. Las alineaciones montañosas y su disposición tienen especial incidencia en la configuración del clima, la red fluvial, los suelos y su erosión. En cuanto a las costas decir que existe un predominio abrumador de playas y costas bajas en el litoral atlántico, mientras que en el mediterráneo tienen presencia los acantilados.
En cuanto a la hidrografía comentar que los ríos de la cuenca atlántica se caracterizan por ser extensos, discurrir en su mayor parte por terrenos llanos y regar extensos valles. Pero por otra parte nos encontramos con los que forman la cuenca mediterránea de los que podemos decir que son más cortos, más estacionales y con más pendiente media.
Por último hablar de la flora de Andalucía de la que podemos decir que la vegetación típica es la del bosque mediterráneo, caracterizado por vegetación de hoja perenne y xerófila, adaptada a lo largo del período estival de sequía. La especie dominante es la encina.